Gerdau Diaco, la siderúrgica líder en aceros largos del país, enciende las alarmas tras los múltiples terremotos que ha experimentado México durante el mes de septiembre y que han afectado a miles de personas, y por la latente posibilidad de movimientos telúricos que puedan ocurrir en Colombia.

En la mayoría de los desastres causados por terremotos, las muertes durante o después de un sismo se deben al colapso de las edificaciones, por lo que el Gobierno colombiano expidió el 19 de marzo de 2010 el decreto 926, por el cual se expide el código colombiano de construcciones sismo resistentes NSR 10, que tiene por objetivo fundamental proteger las vidas humanas. Para ello, estableció una serie de reglas para el diseño y construcción de edificios y características de sus materiales de forma que soporten sacudidas bruscas del terreno. La normativa abarca la construcción de nuevos edificios y la adecuación sísmica de los que ya existen.

La siderúrgica ha denunciado a través del Comité Colombiano de Productores de Acero de la ANDI la presencia de barras aleadas que ingresan de manera ilegal (contrabando) al mercado nacional y que incumplen el Reglamento Colombiano de Construcción Sismo Resistente (NSR-10). Lo preocupante de la situación es que éste es un elemento ampliamente utilizado en la construcción civil.

El acero en la construcción es esencial, pero no cualquier acero. La norma NSR 10 exige que el acero de refuerzo de concreto de la estructura debe ser capaz de resistir las fuerzas sísmicas, teniendo suficiente capacidad de ductilidad, por lo tanto, es importante generar conciencia de que todos los inmuebles del país cuenten con materiales idóneos para soportar las intensidades telúricas a las que pueden estar sometidos.

La ductilidad y la resistencia son dos conceptos básicos contenidos en la norma de sismo resistencia en Colombia. Nos enfocaremos en la ductilidad, que se define como la capacidad de los materiales o de las estructuras para deformarse plásticamente sin llegar a disminuir su capacidad resistente.

En Gerdau Diaco el acero se obtiene a partir de la fusión de la chatarra para después afinarse y posteriormente se conforma mecánicamente, un proceso de alta calidad ineludible y por el cual adquiere gran resistencia y ductilidad el producto final.

Gerdau Diaco, la principal productora de acero de Colombia, es una de las empresas que en el país ha sido certificada con el cumplimiento de la norma de calidad en sus productos. Por lo que desde Gerdau Diaco, se ha venido insistiendo en la importancia del cumplimiento de dicha normatividad y se ha advertido la preocupante situación por la que atraviesa el país debido a la saturación del mercado nacional de acero de contrabando. Este contexto no sólo ha tenido impactos desfavorables para la producción siderúrgica local en términos de cifras, sino que además representa un riesgo inminente que amenaza la integridad de la población colombiana.

En lo corrido del 2017 a Colombia entraron, por lo menos, 40.000 toneladas de barras que al no tener riguroso seguimiento, control y trazabilidad, no garantizan el cumplimiento de los requisitos exigido por el código de construcciones sismo resistentes por lo tanto su uso aumenta la probabilidad de riesgo para la integridad de las personas.

De acuerdo con la NSR 10, el 87% de la población colombiana se encuentra concentrada en zonas de amenaza sísmica catalogadas como media o alta. Es decir, al menos 41 millones de colombianos estarían expuestos a verse afectados por un sismo de gran categoría.

Gerdau Diaco reconoce el esfuerzo que las autoridades competentes vienen adelantando, especialmente desde la Superintendencia de Industria y Comercio y desde el Comité de productores de Acero de la ANDI para combatir esta problemática, e insta a todos los involucrados en la industria de la construcción a trabajar de manera responsable, verificando siempre la calidad de los materiales utilizados en sus proyectos para suprimir los riesgos previsibles de cara a la población colombiana.