Martha Moreno Mesa

El sector de la construcción en Colombia tiene un nivel de innovación o aprovechamiento de la tecnología bajo, comparado con otros sectores productivos, lo que es preocupante, ya que la economía y los mercados evolucionan rápidamente, y aquellos países o sectores que no involucren la tecnología en sus procesos de gestión quedarán rezagados.Esta implementación es posible en todas las actividades y en cada fase de la actividad. En Cataluña, por ejemplo, se está desarrollando un dispositivo que se coloca en el interior de los cascos de protección de los trabajadores de la construcción con el objetivo de mejorar su seguridad. Este desarrollo mide el estrés térmico, las situaciones en las que se expone a caídas e incluye un botón de alarma para situaciones de riesgo, entre otros.

Este es solo un ejemplo práctico de desarrollos e innovaciones que se están incorporando con mayor frecuencia en el sector de la construcción. Por eso, para el Gremio es una prioridad promover en los empresarios la estructuración de estrategias de crecimiento eficiente y productivo, donde la tecnología sea la principal herramienta de trabajo que lleve a la industria a ser más eficiente y eficaz.

Algunos han implementado tecnología como la geolocalización de los proyectos en algunas aplicaciones para que los usuarios reciban alertas en el celular de acuerdo con sus intereses, o tecnología cuya aplicación resulta todavía lejana pero que ya ofrece ventajas competitivas a empresarios que incluyen en sus proyectos sistemas digitales donde el usuario, por ejemplo, desde el teléfono celular puede activar electrodomésticos en tiempo real o hacer seguimiento a tareas de la casa. Otros empiezan a usar la realidad virtual, con el propósito de comercializar sus proyectos dándole al usuario herramientas de fácil acceso para conocer las especificaciones del inmueble.

Los procesos constructivos tienen ya su disposición herramientas como la impresión 3D, que puede generar ahorro de material y simplificación en las actividades. Además, varios proyectos ya utilizan la metodología BIM (Building Information Modeling), que permite digitalizar los procesos constructivos a lo largo de todas las fases, lo que supone una verdadera revolución tecnológica para la cadena de la construcción. Esta herramienta permite construir de manera más eficiente, reduciendo costos y permitiendo el trabajo colaborativo.

Para avanzar en el tema, es fundamental que los empresarios tengan claro que la adopción tecnológica no siempre requiere de una alta inversión. Por el contrario, implementado soluciones con herramientas, a veces gratuitas, que mejoran significativamente los procesos y actividades cotidianas, se logra optimizar el trabajo y el tiempo de respuesta. Más que robustos presupuestos, se requiere un cambio cultural que permita hacer de las herramientas tecnológicas un medio para cerrar la brecha.

Con esto en mente, en Camacol Bogotá y Cundinamarca hemos encontrado en la tecnología un aliado en el proyecto que busca racionalizar, optimizar y simplificar los trámites de urbanismo y construcción, un tema que preocupa a los empresarios que a diario se enfrentan con tiempos excesivos, duplicidad de requisitos, desarticulación entre entidades y reprocesos, entre otras dificultades.

Con esta y otras iniciativas, se pretende que el edificador sea un sector que involucra la tecnología en sus estrategias de negocio, como un mecanismo de simplificación y competitividad empresarial, lo que nos convertirá en un sector más competitivo y eficiente para responder al desarrollo urbano con el que estamos comprometidos.

Por: Martha Moreno Mesa
Gerente Camacol Bogotá y Cundinamarca