Bitcoin, Ethereum, Monero son monedas cifradas que a diferencia del euro o del dolar se pueden cargar en el celular, con ellas se compra casi cualquier cosa en línea.

¿Qué ventajas y desventajas conllevan?

A Kitty le encanta comprar en internet y utiliza Bitcoins, Ethereum, Ripple, Monero, no es dinero real, sino monedas digitales que carga en el celular. Como ella hay cinco millones de alemanes.

Kitty maneja sus criptomonedas en «carteras». Estas cuentas son anónimas y están cifradas o encriptadas, de ahí el nombre, con ellas compra en internet. Cada vez mas empresas aceptan las criptodivisas.

Por ejemplo, un hotel en Moscú, el pago es cuestión de minutos, mientras que una transferencia bancaria normal al extranjero tarda unos 4 días.

Y ademas cuesta dinero: comisiones de otros bancos, cambio de moneda, y tasas, en total 28 euros adicionales.

La transacciones en criptodivisa se realizan de cartera a cartera y casi siempre son gratuitas, no intervienen ni bancos, ni el Estado, ni los bancos centrales. El cliente deja de ser transparente.

Las criptomonedas de Kitty no están registradas de forma central, sino gestionadas en millones de computadoras de muchos usuarios, las operaciones quedan a la vista de todos, pero son anónimas.

Esto permite comprar drogas, o armas, a espaldas de la policía, una realidad que ha manchado la imagen de las criptomonedas.

Y tampoco son 100% seguras: En agosto de 2016 piratas informáticos robaron bitcoins por valor de 58 millones de euros, el precio de la criptomoneda cayó (temporalmente) un 20%.

A pesar de ello, cada vez hay más monedas digitales en circulación: a principios de 2017 su valor en euros era de 17 mil millones.

Kitty no necesitará renunciar a sus bitcoins en su hotel de Moscú, no le quedará mucho tiempo para hacer turismo…