El canciller Jorge Arreaza calificó de «fanfarronería» por parte de Estados Unidos el proyecto de ley que el Senado de ese país aprobó para solicitarle al Departamento de Estado que trabaje con organizaciones no gubernamentales para enviar alimentos y medicinas al país.

Arreaza destacó que, de aprobarse este proyecto de ley de la Cámara Baja del Senado estadounidense, sería una ley para Estados Unidos y no para Venezuela, y que Naciones Unidas «sería la primera en negarse porque multilateralmente este es un adefesio jurídico que no tiene ninguna validez».

«Son fanfarronerías politiqueras internas de Estados Unidos, incluso parte de las campañas electorales buscando el voto latino. Es un absurdo», agregó.

Por otra parte, el ministro venezolano informó que 63 países firmaron la declaración conjunta en el Consejo de Derechos Humanos de Ginebra en apoyo a la «no injerencia» sobre Venezuela, y en apoyo «al reconocimiento al proceso de diálogo».

Sostuvo que, entre otros artículos, la declaración establece que «es imperativo» respetar la soberanía de Venezuela de conformidad con el derecho internacional.

Entre los países firmantes, Arreaza mencionó a Cuba, China, Rusia, Bolivia, Nicaragua, Irán, Ecuador, Irak y Haití, entre otros.

Arreaza además confirmó que un grupo de «relatores especiales» de las Naciones Unidas visitarán el país el mes entrante para evaluar la situación de ese país en la defensa o protección de los derechos humanos, y señaló que la visita es a petición del Gobierno venezolano.

«Invitamos a una serie de relatores especiales, gente de verdad con rigor profesional, con objetividad en su trabajo, que van a visitar Venezuela este noviembre y van a venir en enero también algunos de ellos, y nosotros aquí les abriremos las puertas para que comparta(n) nuestra realidad», dijo en rueda de prensa.

Estas visitas, según Arreaza, servirán para que «ellos vean el gran esfuerzo que ha hecho la revolución bolivariana (…) en proteger, preservar y blindar los derechos humanos, sociales, civiles y culturales, económicos de todos los venezolanos».