Sequías, el gran incendio forestal a inicios de 2020 y tala de árboles, son los agentes que más han afectado las condiciones de vida de los marsupiales según la directora de la Fundación Australiana de Koalas, Deborah Tabart.

La fundación estimó que solo en el estado de Nueva Gales del Sur, se presentó una reducción del 41% de los Koalas y que a nivel general entre el 2018 hasta el día de hoy se ha presentado una reducción de 80.000 a 58.000 marsupiales, una reducción del 27,5% de esta especie.

Tabart precisó que las cifras pueden ser peores, y que se debe actuar inmediatamente para contrarrestar la desaparición de los Koalas. Tildó al sector inmobiliario y constructores de carreteras como los uno de los mayores destructores del hábitat de los marsupiales, solo detrás de las sequías y deforestaciones, mencionó «Si esas excavadoras siguen trabajando, temo de verdad por los Koalas».

La tendencia de alza en nacimientos de Koala no se produjo en ninguna Zona del país. En estudios se evidenció que en ciertas zonas se podían encontrar 5.000 koalas, que no es un número amplio, y que en otras regiones, se calculaban solamente cinco o diez.
La crisis climática reduce significativamente a los marsupiales. Ésta genera un efecto dominó caótico para el hábitat y alimento de los Koalas, casos como el estado de Nueva Gales del Sur que ha presentado sequías en los últimos diez años, produciendo escasez de agua en los sistemas fluviales, acabando con los eucaliptos rojos, sustento alimentario de los Koalas.

Este estado fue uno de los más afectados por los devastadores incendios forestales a inicios de 2020. A pesar del inminente desastre, y los datos negativos en torno al ambiente y registros de Koalas, Nueva Gales del Sur presentaba áreas sin Koala, esto deduce que a pesar del gran desastre, la vida de los Koalas en esa región ya estaba siendo vulnerada.
La directora de la Fundación Australiana de Koalas instó al gobierno a decretar una ley de protección del Koala. El Gobierno Australiano, por su parte, solicitó en junio del presente año, comentarios públicos sobre un plan nacional de recuperación de Nueva Gales del Sur, Queensland y Canberra, zonas más afectadas por los incendios y la sequía, y sobre la condición de los Koalas, sobre si es viable pasar su estatus de «vulnerables» a «en peligro».