Hoy domingo, por fin había terminado todo lo que tenía que hacer; hasta que la lavadora no acabase no podría tenderla, los niños no tenían deberes en los que debiera ayudarlos, y aún no era la hora de la cena. Tenía media hora para dedicarla a mí, puff, solo media hora, al principio me pareció mucho, pero cuando abrí el libro de relatos de Lovecraft, mientras me leía el relato Dagón, que por cierto no me ha gustado, miré el libro que tengo en mi mesita de noche de poemas de Rubén Darío y decidí que debía también sacar tiempo para él, así que solté un libro y abrí otro. Después de tres poemas que no me gustaron, encontré otros dos que sí, pero los minutos iban pasando y la cuenta atrás parecía recordarme que pronto debía volver a hacer cosas, así que decidí ver un poco las noticias en el móvil y ponerme a revisar mi próximo poemario.

A la tercera noticia me detuve y entré en ella, a pesar de saber que el tiempo seguía corriendo en mi contra; el titular decía: “La nueva imagen de Minnie Mouse que enfurece a internet”. Me quedé estupefacta al comprobar que la gente criticaba que, por sus 94 cumpleaños, Stella McCarney le hubiera regalado un diseño de traje con pantalón, ¿en serio?

No me podía crees que en el 2021 hubiera gente quejándose por el hecho de que a Minnie le hubiera puesto Disney pantalones, cuando hace poco criticaban al mismo Disney por ser machista en sus inicios.

Ya sí que es verdad que no entiendo a la gente, me parece absurdo que critiquen a Disney por unos dibujos que se hicieron en una época en la que ciertas cosas no estaban mal vistas, y me parecería horrible que modificasen cualquier cosa de aquellos dibujos. Pero, vamos a ver, si lo que se dibuja en el futuro o lo que se realiza en el presente se hace atendiendo a nuestra época sin perder la magia Disney, me parece un acierto.

A Minnie se le ha dejado su lazo, sus zapatos y sus lunares, pero en vez de ir vestida de rosa, se la ha vestido de azul y negro, con un traje de chaqueta y pantalón, para mi gusto, acertado a la época en la que vivimos y en la que los que critican que se cambie el aspecto de Minnie, están protestando por el machismo que se vive en el mundo, por las etiquetas que siempre se nos colocan a las mujeres y por la falsa de inclusión que se está haciendo respecto a distintos tipos de personas.

Pues perdonad, los falsos sois vosotros, casi se me descuelga la boca al leer comentarios como “el mundo se está acabando” “solo faltaba esto” “Me parece que todos nos estamos volviendo locos” “Minnie es MInnie y no deberían haber hecho eso con ella”.

A ver si somos coherentes con lo que decimos y por lo que luchamos, y a todos esos que aún siguen diciendo que ya no existe machismo, haceros revisar las entendederas y autoanalizaros un poco, ¿Qué os parece que Minnie lleve pantalones? Tal como dice el artículo que he leído, en 1911 Paul Poiret comenzó a fabricarlos, y mi más querida diseñadora, Cocó Chanel les dio fama en los años 30.

Conclusión: aparte de agotar mi media hora sintiéndome indignada, pienso que la sociedad está en pleno retroceso, damos un pasito hacia delante y tres hacia atrás. También pienso que todos somos unos hipócritas que decimos luchar por la igualdad, por la inclusión y por todo lo que está de moda, pero a la hora de avanzar en ideas, preferimos criticar lo que se hizo hace un montón de años para desprestigiar a cualquiera.

Dejad de criticar lo que se hizo en el pasado, comenzad a cambiar el presente. A eso se llega dejando de ser estúpidos y mirando al futuro, porque Minnie no tiene que vestir de rosa toda su vida, y si en vez de arreglar la casita de Mickey trabaja en uno de los puestos directivos de una empresa y viste con traje de chaqueta, significará que hemos avanzado, y ese techo de cristal ha sido destruido.

Por María Beatriz Muñoz Ruiz